Volver a empezar…
He de reconocer que llevo casi 70 días desubicada…. la vida a veces nos hace afrontar situaciones críticas en las que se pone a prueba nuestras convicciones más profundas: la perdida de un ser querido, un trabajo, la enfermedad de un familiar, un viaje de ida sin vuelta, un país desconocido, el status, nuestra imagen…qué se yo.
Situaciones donde la inseguridad es el reflejo de nuestro miedo más inminente ante lo desconocido y un mecanismo de defensa. No descubro nada diciendo que ante una situación de cambio-crisis-dificultad la reacción más habitual suele ser de atacar o huir.
Enfrentándonos para minorizar el peligro o escapando para evitar el dolor.
Algunas filosofías hablan que estas situaciones “complejas” nos ayudan a estar en continuo proceso de crecimiento y que nos llevan a una oportunidad constante de aprendizaje, de cambio, de búsqueda de alternativas, que en la vida no nos hubiéramos planteado sino hubiéramos pasado por dichas experiencias. Y cierto es que las situaciones no podemos modificarlas sin embargo si podemos elegir como vivimos esos cambios.
En estos días he vivido la experiencia de un ser querido, como su mundo profesional ha desaparecido como el humo. Es como ver el anuncio de telefónica, tan aprovechado y directo a nuestros días. Una de las cosas que me llama la atención es la premonición de las cosas que están por llegar. Parece que a veces aparece ese sexto sentido que nos da la llamada de que algo va a suceder. Me recuerda a el libro que tan de moda se puso durante el 2008 “El Secreto” si piensas que algo va a suceder probablemente suceda pues encontraras los motivos, las circunstancias y las formas para que así sea y así es como lo expresas y se lo pides al mundo.
Es como si nos convirtiéramos en torres de transmisión humana, donde dirigimos cada uno de nuestros pensamientos y estos llegan de una forma incomprensible de nuevo a nosotros.
No quiero perder mi trabajo y la consecuencia es que lo pierdes.
No quiero que me vuelvan a partir el alma y la consecuencia es que se te parte.
No quiero y la consecuencia es que quieres…
No quiero transmitir con ello mi más ciego fervor hacia todo lo que habla Rhonda Byrne en su libro, sin embargo si soy una convencida de que todo cambio pasa por nosotros, tanto en obra como en pensamiento.
Y cuando llegan estos cambios, llegan las preguntas en busca de respuestas, pues nos sentimos como elefantes en una cacharrería, donde cada movimiento…hace un ruido estrepitoso. Mi amigo siempre ha ido de fuerte, persona proactiva en muchas áreas de su vida, donde no tenía cabida un ápice de debilidad, sonrisa en boca y siendo un gran comedor de energías negativas de los demás, aquellos a los que yo les llamo, vampiros de energía.
Y ahí se encontró él, preguntándose ¿Porqué y para qué? Y es entonces cuando surgen los miedos, las sensaciones y sentimientos que se encuentran agazapados cuando uno se encuentra solo.
Y es cuando ha decidido parar…
Cuando se ha marchado para siempre…
Querida Begoña,me uno a tu sentimiento,y dirijo hacía ti toda la energía positiva de la que soy capaz . En este momento más que nunca: !Aquí me tienes! y me gustaría poder servirte para compartir tu actual momento.
Sabes que me gusta estar cerca de tí… Por Siempre.
Abrazos
Sara.
@ Sara…como bien cuenta Robert Fisher en su libro El Caballero de la Armadura Oxidada, la vida es una andadura llena de esperanzas y desesperanzas, de ilusiones y desilusiones, de risas y lágrimas.
Aprender de cada una de ellas son las herramientas necesarias para llegar a la cima de la montaña.
Hay ocasiones en que cuando uno se cae, cabe la posibilidad de que sea una oportunidad. Para mi personalmente lo ha sido, para valorar lo que realmente tengo y seguir siendo consciente de las oportunidades que me sigue dando la vida.
Gracias Sara….te llamaré..
Hola Begoña,
Después de muchas preocupaciones he llegado a una conclusión… y es que si no me estoy equivocando, si no estoy tropezando, si no estoy peleando con piedrecitas en los zapatos… entonces empiezo a preocuparme!!
¿Por qué? Pues por que si no me pasa todo lo anterior entonces no estoy creciendo y, como he entendido ese agobio, cada vez que siento ese mal, después de sufrir un ratito…, en el fondo me llega una sonrisa picarona… (se que estoy en el buen camino… 😉 )
Querida amiga, tambien hace dias que yo ando perdido.
Yo creo que aunque tengamos la mala suerte de pasar por situaciones difíciles de ellas no salimos mas reforzados. Salimos tal y como nos lo planteamos. Siendo lo que somos. Siendo como somos….
Un abrazo
Al final la una certeza es que mañana saldrá el sol (almenos hasta hoy) y el resto es sólo circunstancial. Creo que hemos vivido tanto tiempo en un ciclo positivo que hemos perdido la memoria que estas cosas suceden de forma regular..y cómo duelen!!!Hoy y ya para siempre me parece que no nos queda otro camino que «volver a empezar..» ¿pero acaso no estamos empezando cada día? Cada día decidimos si seguimos o lo dejamos, si vamos a por algo más o estamos bien cómo estamos. Creo que en muchas ocasiones no lo pensamos muy en serio pero siempre estamos empezando una vez más.
Un abrazo
Toni
Decía Ghandi una frase que más o menos reproduzco: «todas las noches cuando me acuesto muero, todos los días cuando despierto, resucito». De derrota en derrota hasta la victoria final, ánimo.
@ Jesús Lopez…Ser consciente que las cosas, cambian, se transforman desde los diferentes ambitos de sonrisas y lágrimas, hace que valoremos que éstas, suceden por alguna razón, aunque en el mismo instante no lleguemos a entenderlas.
Y me quedo con tu sonrisa picarona…
Gracias Jesús…
@ Juanjo López… Nosotros le damos el valor correspondiente a cada cosa que nos sucede, y ser uno mismo, ya en sí, es un gran valor.
Gracias Amigo..y por cierto si andas perdido…yo estoy aquí…cuenta conmigo…
@Toni Pinies…Volver a empezar como tú bien dices, es algo que hacemos cada día.
Me alegra y agradezco que me aportes esta reflexión.
Un beso Toni…
@ Pedja… Me quedo con tus palabras, con tu estar ahí en la distancia, sin conocerte, y con tu ánimo, gracias Pedja.
Y las palabras de Ghandi…Impresionantes, reflexibas, como siempre.