Año 1999. Tenía 31 años, llevaba 12 años trabajando. Me encontraba en la Cervecería Botijos en la Playa de San Juan junto a unos amigos. He de reconocer que tengo buenos amigos y que cada uno de ellos me aporta cosas diferentes. Andábamos disfrutando de unas buenas patatas bravas, cuando de una forma espontánea trasladé, «Estoy cansada. No me veo con 40 años llevando un maletín. No quiero dejar al azar mi futuro«.
Mi amiga Lola como buena terapeuta me preguntó, ¿Qué necesitas? Y dije, «estudiar, formarme. Tengo mucha experiencia sin embargo no tengo nada que avale ni siquiera mi conocimiento».
Recordar que por aquella época, estaba en auge que el que no tiene estudios y un Máster no es una persona cualificada, y yo también me lo creí.
El primer paso fue cambiar de empresa, recordáis provoque aquel cambio.
El segundo, todo aquello que empecé a ganar el doble, lo invertiría en mi formación. A partir de ahí, no he dejado de estudiar. Conocí el Coaching gracias a Novartis y desde entonces no dejé de explorar todo aquello que tenía relación con las personas.
Fue entonces cuando descubrí mi vocación. De hecho recuerdo que en un curso impartido por la empresa nos preguntaron cómo te ves dentro de cinco años, y respondí, trabajando con y para la mejora de las personas.
Posteriormente hice mi Máster de Dirección de Marketing a pesar que mi jefe directo me dijo que no me serviría para nada. Luego empecé con todo aquello que tenía que ver con habilidades y competencias directivas. Incluso me metía en cursos donde no tenía cabida.
Recuerdo que Fundesem creo un programa específico para empresarios de la provincia de Alicante con Luis Galindo, @luisgalindo_lg en aquel curso solo podían asistir personas que tuvieran empresas, y personas a su cargo. Yo trabajaba para Novartis, no tenía empresa y no tenía personas a mi cargo. Era un grupo reducido donde durante nueve meses se trabajarían nueve competencias directivas. Yo quería hacer ese curso. Y sabéis que ocurrió que lo hice. Convencí a Luis que necesitaba estar y tras una larga conversación acepto mi ingreso en el curso.
Durante los cuatro años que trabajé para Novartis, no dejé de estudiar. Todo lo que no había hecho cuando se consideraba que se tenía que hacer, es decir adolescencia, lo hice 12 años después. Cursos de Pnl, Programa Coaching Profesional por IESE Universidad de Navarra, etc.
Mi primer libro me lo leí con 29 años. Fue “Dios vuelve en una Harley”. Fue Lola (la terapeuta del inicio de esta historia) quien me lo recomendó. Lo devoré en una tarde de sábado. Siempre tuve la creencia que a mí no me gustaba leer. Cuando lo escucho de personas a las que quiero, se me parte el alma, sabiendo cuanto se pierden.
Hoy no sé dónde meter todos los libros que compro y que leo.
Lección 5:
Fórmate. Evoluciona, amplia la información. Crea escenarios nuevos con el conocimiento que vas adquiriendo. Tengo amigos que llevan dos años en paro. Y están con tanto miedo que les paraliza hacer cosas nuevas. Hoy existen oportunidades de reciclaje de forma gratuita. No hace falta gastarte excesivo dinero en formación como he hecho yo. No me arrepiento de esa inversión, sin embargo hoy se puede aprender de muchas maneras.
Estamos en la era digital, todo está en red. Hace apenas 12 años esto no lo teníamos.
Las personas quieren hacer cosas distintas pero no hacen dentro de su día a día cosas distintas. Voy a explicarme. Todos buscamos la panacea. A mí me encantaría tener esa idea que me retire plácidamente a cualquier lugar del mundo junto a una playa, mientras mi cuenta corriente suma ceros. Pero me llamo Begoña, vivo en Alicante y no tengo una fórmula mágica. Lo que si tengo es la posibilidad de hacer todo lo que esté en mi mano para crecer por dentro, y tal vez, en un momento determinado con todos aquellos imputs que le doy a mi vida, pueda tener una idea que me acerque más a mi objetivo. No pararme, no estar metida en donde me siento arropada y cómoda, es mi primer paso.
Feliz Año. Que el 2014 nos ofrezca hermosos día para recordar y en estos doce nuevos meses tener la oportunidad de poder continuar leyéndonos y de crecer compartiendo.
Un cálido abrazo
Querida Katy gracias por tu mensaje, por seguir pasando por este rincon que ha ido evolucionando con los años.
Te deseo un gran año, y sigamos saboreando la vida.
Feliz 2014 Begoña