El tiempo marca cambios. Y en política y sus dirigentes con un amplio recorrido en la vida pública son precisamente los que mas acentúan ese cambio.
El aislamiento en la política por parte de un político no es algo premeditado, simplemente es un mecanismo de defensa, inconsciente, en algunos casos y en otros es la alimentación del propio ego. Después existe el aislamiento creado y dirigido desde dentro del partido político y ahí la formula de poder gestionarlo tiene otro matiz bien diferente.
Pocas veces, en política, pueden verse reuniones en las que las personas les digan a sus dirigentes lo que verdaderamente piensan sobre ellos. Muchas veces, ni su propio equipo se lo dice.
La gran mayoría de la gente que rodea al líder político, y sobretodo en la política municipal, incluso la gente que le saluda en la calle, en su día a día, viéndolo tomando un café o cuando entra en una tienda a saludar, dice realmente lo que piensa; incluso aun existiendo una crítica hacia su gestión, camuflan la realidad con diálogos varios dónde la objetividad se disfraza y dice “señor alcalde, que gusto, ¿cómo está su esposa?, mándele saludos, tome, le regalo este chocolate”.
El entorno no ayuda al líder a salir de su aislamiento, pues ven y viven un mundo distorsionado y por eso mismo necesitan herramientas que les ayuden a ver lo que verdaderamente pasa ahí fuera, en su municipio e incluso, dentro de su propia “organización”.
Las encuestas en el ámbito externo o un Feedback 360º internamente, ayudan a que “la soledad” se mire en el espejo y en vez de no ver nada, descubra nuevas alternativas de conexión con el electorado y la realidad. Y no son exclusivas de implementación en época de elecciones municipales o elecciones electorales en general.Romper con los hábitos adquiridos de comunicación y encontrar nuevas vías de información, acercan al dirigente al presente.
La burocracia, el cansancio y el miedo, son los enemigos a batir cuando uno lleva mucho tiempo sentado en el mismo sillón, y solo cuando uno realmente se para y se observa frente al espejo (su coach), tiene la capacidad de ver, aquello que a uno no le sienta bien.
Realizar este trabajo de introspección es complejo y realmente difícil si uno no va bien acompañado por un experto en mirar hacia dentro, hacia aquellos lugares donde muchas veces evitamos mirar porque el paisaje que vemos no nos gusta o simplemente no sabemos que encontraremos.
Confiar en uno mismo a través de un externo es un primer paso. Entrenarse en esas habilidades para generar una mejor gestión personal y política es obligación de todo aquel que quiera dedicarse al servicio de lo que es la esencia de la política, el servicio de los demás.
En Integridad Política sabemos y entendemos el entorno político actual. Sabemos abordar las diferentes situaciones a las que se enfrenta un político a lo largo de su vida publica.
Begoña gozalbes